En documentación recogida en los renombrados Anales de las Ordenanzas de Correo se pone de manifiesto que en 1743 este Oficio de Correo es gestionado para la Renta de Estafetas y Postas en régimen de Administración directamente por el Estado, habiendo aportado al valor general de la misma la cantidad de 226.090 Reales y 19 maravedíes de su producto entre el 1 de enero de 1738 hasta finales de diciembre de 1742. Nuevamente aparecen más datos postales en 1748 sobre este Oficio de Correo señalado como Caxa, a través del cual se ha de encaminar en derechura la correspondencia escrita desde el Reino, hecho del que se deduce su significativa relevancia postal. Durante las negociaciones llevadas a cabo para el establecimiento de un segundo correo semanal con Francia, promovidas para suprimir la francatura que existía entre los Oficios de Correos de Barcelona y la Oficina de cambio francesa de Perpiñán, se indica el hecho de la irritación que causó a Don Luis Ortiz de Velasco, actual Administrador de Barcelona en 1760.
El primer mapa de postas de España realizado por Tomás López, incluido en la obra de Campomanes, recoge además de mejoras en el trazado postal del Reino la fusión de las Carreras Generales de España en 6 grandes líneas de comunicación en comparación con la cartografía imaginaria que señalaba la obra de Blas Alonso de Arce en 1736 donde para el Oficio de Correo de Barcelona se manifiesta la categoría de Caxa con parada de posta montada. Dos años más tarde, para mejorar la dirección de la correspondencia certificada desde el Oficio General de la Corte, para así evitar confusiones en este tipo de servicio, se han de encaminar los pliegos certificados para este Oficio de Correo a través de la Carrera de Aragón y Cataluña hasta el Oficio de Zaragoza, desde donde serán posteriormente remitidos al Oficio de Barcelona.
En 1775 se le mantiene a este Oficio de Correo la categoría de Caxa Principal, donde asimismo se indica que recibe los despachos y las correspondencias para ella desde la Caxa Central de Madrid los martes y viernes, siendo despachada correspondencia para la Corte todos los miércoles y sábados llegando a Madrid los martes y viernes al amanecer, obteniendo un período de 15 días en recibir las respuestas.
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